Los SMS sobre la dana al grupo de responsables de la Generalitat alertaron del desbordamiento del Poyo media hora después del Es-Alert

Lo cierto es que no. Del análisis de los SMS enviados ese día al citado grupo, a los que ha tenido acceso LAS PROVINCIAS, se desprende que los responsables de la Generalitat no tuvieron conocimiento del desbordamiento del Poyo y otros barrancos hasta después de que ya se hubiera enviado el mensaje Es Alert de las 20.11.

Los mensajes remitidos al grupo de SMS ponen el foco en el peligro de rotura de Forata y en las diferentes alertas hidrológicas y de Emergencias que se fueron sucediendo durante la jornada, pero ni rastro del desastre que se cernía sobre l'Horta Sud y otras poblaciones del interior de Valencia por el Poyo y su red de barrancos y ramblas antes de la mencionada hora.

El abogado de Emilio Argüeso ya ha solicitado a la instructora que incorpore a la causa estos documentos. El letrado ha presentado un total de 13 archivos con los 34 SMS que circularon por este grupo. Ahora el juzgado deberá decidir si procede o no con la diligencia.

Las comunicaciones por mensaje telefónico al grupo empiezan a producirse a las 8.04 horas y se prolongan hasta las 21.21, como consta en los registros telefónicos. Y no es hasta las 20.47 cuando uno de esos SMS alerta de un posible desbordamiento en el entorno del Poyo. «Derrumbe de puentes con coches en la A-7, km 336, municipio de Riba-roja. Afectadas también torres eléctricas. De momento se desconocen heridos o atrapados», reza la misiva, que llegó al grupo de responsables de la Generalitat más de media hora después de que ya se hubiera enviado a la población el tardío e inconcreto mensaje Es Alert.

Y ni una referencia más al riesgo de desbordamiento del Poyo hay en los mensajes. Las comunicaciones empiezan por la mañana con mensajes sobre la alerta naranja por lluvias de Aemet y la emergencia por lluvias en la Ribera Alta. Se da cuenta después del cierre del puerto de Sagunto y a las 10.03 horas se comunica la elevación por parte de Aemet de la alerta nivel rojo en todo el litoral e interior norte de Valencia.

Es a las 11.45 cuando un SMS alerta de un primer rescate, «dos personas atrapadas sobre el techo del coche a 300 metros de la A-7, en zona del barranco del Cami de la Muntanya», un paraje de la Ribera, junto a L'Alcudia. A las 12.34 horas aparece por primera vez «el río Magro y la rambla del Poyo» en los mensajes, pero simplemente para subrayar la alerta hidrológica de Emergencias que ya constaba por un sinfín de cauces.

El foco se desplaza después a Utiel, con un mensaje que constata la situación de emergencia 1 en el municipio a las 14.15 y su elevación después al estadio 2 a las 14.53 horas. Y es pasadas las tres de la tarde cuando en el grupo de SMS se notifica que se cursa la «solicitud de intervención de la UME».

El escenario salta entonces a la que, según todos los implicados en la gestión de la catástrofe, fue el verdadero foco durante el trágico 29-O, pese a la debacle que se cernía desde el sinuoso barranco del Poyo: el riesgo de rotura de la presa de Forata. Hasta cuatro SMS subrayan el peligro con comunicaciones como «vertido inminente del embalse de Forata, con aviso municipios aguas abajo», o el escenario 1 y después 2 en dicha presa. Todo ello entre las 17.18 y las 18.34 horas, instante este en que se notifica que se ha convocado a todos los alcaldes del entorno de Forata a una reunión.

El impacto que la dana estaba teniendo ya en la red de transporte queda reflejado a las 18.35 horas. Es entonces cuando se comunicado al grupo en el que están el investigado Argüeso y el director general de Emergencias, entre otros responsables de la Generalitat, que Adif informa de la «interrupción de la circulación entre Valencia y Utiel-Requena de los trenes de media distancia y cercanías». Media hora después esta alerta escala también a los convoyes de alta velocidad.

La cadena de mensajes finaliza con el SMS que informa del desbordamiento del Poyo a las 20.47, más tarde que el Es-Alert, pero que incluso es después matizado en un último mensaje, indicando que el puente «no ha colapsado, se ha resquebrajado, con cierto hundimiento».